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Esta información tiene como único fin servir de descripción general y no debe considerarse como consejo médico por parte de Health-Tourism.com. Cualquier decisión sobre los tratamientos médicos, asistencia o recuperación se debe hacer únicamente tras una consulta adecuada y el asesoramiento de un médico cualificado.
¿Qué es la aspiración testicular de espermatozoides (TESA)?
La TESA es una técnica de recolección de espermatozoides que se utiliza entre otras cosas para detectar la azoospermia (una afección médica en la que el hombre no tiene espermatozoides en el líquido seminal) o recuperar los espermatozoides de los testículos en los hombres que tienen obstrucciones o problemas de eyaculación y no pueden ser tratados por otros métodos.
¿Quién realiza el procedimiento?
El procedimiento de aspiración de espermatozoides lo lleva a cabo generalmente un especialista (urólogo) cuyo campo central de acción es el de la fertilidad masculina. En ocasiones puede realizarlo un endocrinólogo especializado en reproducción y problemas de infertilidad.
Si el esperma se obtiene el mismo día que los óvulos se puede utilizar de inmediato. Si no, puede congelarse y hacer uso de él con posterioridad. Obviamente, debe ser descongelado antes de su uso. Normalmente, los espermatozoides aspirados son suficientes para varios intentos de FIV.
Los espermatozoides recolectados de los túbulos seminíferos en un procedimiento de TESA son generalmente menos maduros y menos móviles que los espermatozoides que se encuentran en el semen eyaculado. Por lo tanto, la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), una alternativa especial de la FIV, es la que se suele utilizar para lograr la fecundación con espermatozoides TESA. Se traduce en la inyección de un solo espermatozoide en cada óvulo.
¿Qué sucede en un ciclo de tratamiento TESA?
- Un ciclo de tratamiento TESA implica que una mujer sea sujeta a un ciclo de FIV de estimulación ovárica con el objetivo de producir múltiples óvulos.
- En el procedimiento de aspiración testicular de espermatozoides se usa una aguja muy fina que se inserta en los testículos. El paciente generalmente está bajo anestesia local. Se extrae una pequeña cantidad de material de la red de diminutos tubos donde se produce el esperma (túbulos seminíferos). Los túbulos seminíferos se procesan posteriormente en laboratorio para comprobar si hay presencia de espermatozoides que puedan ser utilizados para fertilizar los óvulos o ser congelados para un uso futuro. Si la muestra de esperma se congela, esta se descongela y se prepara el día en que se recoge el óvulo.
- Durante la aspiración testicular de espermatozoides se recurre a veces a una ecografía doppler. Gracias a ella se puede lograr una mayor precisión evitando dañar los vasos sanguíneos y por consiguiente la formación de molestos hematomas.
¿Son necesarias algunas pruebas antes del tratamiento?
El médico realizará pruebas que ayuden a predecir si los espermatozoides pueden ser obtenidos en la biopsia. Las pruebas también son importantes para detectar la presencia de condiciones que puedan causar problemas en los niños nacidos a partir del procedimiento. Las pruebas realizadas incluyen:- Pruebas hormonales: se miden la hormona foliculoestimulante (FSH), la hormona luteinizante (LH) y los niveles de testosterona. Los niveles de FSH y LH anormalmente altos, así como unos bajos niveles de testosterona, son un indicador de que los testículos no funcionan correctamente. También indican que las posibilidades de obtención de espermatozoides son bajas.
- Examen físico: si los testículos son muy pequeños significa que las oportunidades de obtener espermatozoides son bajas. Además, el examen físico también sirve para detectar condiciones como la ausencia congénita de los conductos deferentes
- Análisis cromosómico: las anomalías cromosómicas pueden hacer imposible la producción de espermatozoides en algunos hombres. Aunque pueden no provocar más inconvenientes que este, es posible que causen ciertos problemas en los niños nacidos con el uso de estos procedimientos.
- Pruebas para detectar la fibrosis quística: la fibrosis quística es común en los hombres con ausencia de conductos deferentes. Si el gen implicado está presente, las posibilidades de que el futuro niño resulte afectado por la misma afección aumentan. En caso de que ni el hombre ni la mujer sean portadores del gen, el tratamiento puede continuar sin problemas.
- VIH y hepatitis: todos los individuos que almacenan óvulos, espermatozoides o embriones son examinados para asegurarse de que no son portadores ni padecen VIH u otras enfermedades como la hepatitis B y/o C. Esto excluye cualquier posibilidad de contaminación cruzada en los recipientes de almacenamiento del embrión y en el laboratorio.
La mujer también es sometida a examen para comprobar el estado de la matriz. Por otro lado, también se le realizan pruebas de carácter hormonal que aseguren la óptima producción de óvulos.
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